La mayoría de las empresas enfocan todos sus esfuerzos en la consecución de nuevos clientes, concentrando todo su presupuesto en la captación de nuevos leads. No está mal planteado, pero resulta un poco caro: El Coste de Adquisición de un nuevo cliente (CAC) es 6 veces superior a lo que cuesta retener uno. Trabajar en una estrategia de fidelización de clientes tiene muchas ventajas.
¡El que tiene un cliente, tiene un tesoro!
Pero para todo esto, es necesario conocer a nuestros clientes, y no me refiero a conocer su nombre y un email, si no a conocerlos a fondo. ¿Cómo podemos hacerlo? La respuesta es tener un buen CRM. Un CRM (Customer Relationship Management) es, como su nombre indica, una plataforma que favorece la relación entre la empresa y el cliente. Se trata de una Base de Datos de clientes capaz de mostrar las relaciones con tanto detalle, que el equipo de ventas puede acceder directamente a dicha información, responder a las necesidades con planes y servicios y saber qué otros productos ha adquirido un cliente. Detectando así sus necesidades, aumentar su grado de satisfacción, incrementar su fidelidad a tu empresa, potenciar la rentabilidad de tu negocio y automatizar la mayoría de los procesos de marketing y ventas.
Elegir un CRM acorde con las necesidades de tu empresa no es tarea sencilla, por eso te recomendamos que respondas a estas preguntas antes de adquirir uno:
Hay infinidad de ellos en el mercado, algunos gratuitos y otros de pago, pero lo más importante es saber, de antemano, qué queremos para nuestra empresa, y con ello daremos en el clavo. Estos son algunos ejemplos de CRM’s muy potentes:
Como conclusión, tener un CRM adecuado e implementar diferentes acciones de marketing y ventas para tus clientes es crear un sistema para que tu empresa (por lo general, los equipos de ventas y de marketing) puedan usar e interactuar de manera más eficaz y efectiva con los clientes potenciales y actuales.