Saber qué objetivo marcar en tus acciones de marketing no es cosa fácil. Con la experiencia se acaban teniendo referencias de campañas anteriores pero, cuando se empieza o se implementa una nueva estrategia, ¿cómo saber que no se está siendo demasiado optimista o que los objetivos fijados son adecuados a la realidad de la empresa? Estamos hablando de marketing, esto no es un juego de adivinanzas.
Establecer los objetivos correctos en tu campaña de marketing depende de ti, es tu decisión y, por tanto, tu estrategia. Pero nuestra experiencia nos dice que la mayoría de profesionales necesitan una de estas tres cosas:
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Atraer más visitantes a su página web.
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Convertir a más visitantes en leads.
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Lograr que más leads acaben siendo clientes.
¿Te encuentras en cualquiera de estas tres situaciones o en todas? Sigue leyendo y te daremos 3 trucos para asegurarte de que fijas correctamente tus expectativas.
Elige el objetivo de tu próxima campaña de marketing, pero solo uno.
Seguro que estás acostumbrado a dedicar tiempo a pensar qué objetivos son los correctos. Le das vueltas en la cabeza, valoras las posibilidades mentalmente y acabas manteniendo un diálogo contigo mismo porque, lo sabemos, hay muchas opciones.
Eso está muy bien, es importante hacerlo para no estancarse y salir de la zona de confort. Pero no es suficiente: pon los objetivos por escrito para verlos desde otra perspectiva. Puede parecer una tontería pero obligarte a escribirlos es un truco que ayudará a clarificar tus ideas.
Una vez hecho esto, elige uno. Sí, uno. Piensa en encontrar tu amor verdadero, el objetivo sin el que no podrías vivir. Es difícil pero te garantizamos que es muy gratificante cuando lo logras identificar.
Establece plazos que encajen en un plan de marketing.
¿Tienes ya el objetivo correcto? Quizá sí, quizá no. Vamos a ver si supera la prueba del tiempo con una sencilla pregunta: ¿es un objetivo que puedes planificar en varias etapas?
De nada sirve un objetivo que está aislado, siempre debe servir para ir un paso más allá. ¡Esos son los correctos! Como decíamos al inicio del post: si quieres vender más desde tu tienda online o aunque sea un servicio presencial, primero necesitas leads y muy importante para conseguirlos, es el tráfico de tu página web.
Categorizar en uno de estos tres tipos de objetivos de inbound marketing es una forma de pensar en plazos: corto, medio y largo o, si quieres afinar un poco más, diarios, semanales, mensuales, trimestrales y anuales. Con este truco puedes ir dándote cuenta de si tus objetivos son correctos o no.
Cuantifica los recursos siendo realista.
Quizá la parte más difícil pero necesaria para acabar de fijar los objetivos: ¿realmente lo lograré o mejor sigo soñando? No te estreses en esta parte, las matemáticas son la mejor forma de poner los pies en la tierra.
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La base del cálculo son tus datos actuales, no lo que hayas podido leer de media del sector o lo que dice tu competencia que hace. Revisa y calcula: cuántas visitas tienes, tu ratio de conversión visita-lead y el de lead-cliente.
Ya lo tienes, ¡enhorabuena! Has encontrado tus objetivos correctos para tu próxima campaña de marketing.
Y una recomendación final ahora que viene el buen tiempo. Los objetivos de marketing se parecen a los de regímenes para la pérdida de peso: mejor ir poco a poco pero asegurando el trabajo hecho que desear una solución rápida pero poco duradera.